No más líquidos o iniciadores extraños: Chimenea y mechero son la mejor opción para encender el carbón, sin dejar residuos que alteren el sabor y la calidad de los alimentos.
Precalienta tu asador: Deja que tu asador se precaliente por 10 o 15 minutos para obtener cocciones más rápidas y uniformes.
Limpia tu parrilla: espera a que los restos de comida se carbonicen y remuévelos con un cepillo de cerdas de acero. Esto evitará que tus alimentos se peguen y que mantengan un sabor puro.
El aceite va en la comida: evita llamaradas inesperadas o accidentes, aceitando tus alimentos en lugar de la parrilla.
¿Fuego directo o indirecto?: si tu comida se debe cocinar en menos de 20 minutos, necesitas fuego directo. Pero si lo que necesitas es más tiempo en la parrilla, entonces usa fuego indirecto.
Controla la temperatura: las parrillas están pensadas para que tengas un control total de la temperatura, con ventilas ajustables para las parrillas de carbón y perillas para las de gas.
Siempre con la tapa: trabajar con la tapa cerrada te permite concentrar el calor para una mejor cocción, reducir el tiempo de preparación e intensificar el sabor de los alimentos, dejándolos más jugosos.
Todo está en caramelizar: la parrilla a la temperatura correcta carameliza los cortes, dándoles un sabor y una textura que a todos les encanta.
Domina el fuego: evita llamaradas y controla la temperatura de tu parrilla manteniendo la tapa cerrada durante todo el proceso.
Clima/Temperatura: estos dos son clave, si el clima es frío necesitarás más tiempo y calor para tus alimentos, si hay mucho viento la temperatura del cabón subirá y la de gas bajará.
La Experiencia del método indicado:
Fuego directo: el alimento va sobre la fuente de calor y se usa en cocciones cortas.
Fuego indirecto: el alimento va fuera de la fuente de calor y se usa en cocciones más largas.
Término de cocción de las carnes rojas (expresado en grados Celsius):
Término Inglés: 49 – 54
Medio Rojo: 54 – 57
Medio: 57 – 63
Tres Cuartos: 63 – 68
Bien cocido: 68
Término de cocción de carne de cerdo:
Siempre consumir a partir de los 63 °C (grados Celsius).
Término de cocción de aves:
Siempre consumir a partir de los 74 °C (grados Celsius).